Misión
secreta
Narración: Claudia.
La alarma interrumpió la mejor parte del
sueño. Y aquí empezamos de nuevo. Me levanté a regañadientes y entré al baño.
Uh. No era uno de mis mejores rostros. Prometo solemnemente que no me pasaré
otra noche hablando con Andrés. Nunca más. Lo prometo. Mentira. Sonrío.
—Hola, mamá —saludo
al bajar— ¿me das esa manzana?
—¿Es que no vas a
desayunar?
—No lo creo, Andrés
ya me está esperando afuera.
—¿Andrés?
Me doy vuelta al escuchar la voz de mi
padre. Esperen… ¿dije Andrés? Un momento… ¡Rayos! Se me había olvidado al
pequeño detalle de que ellos no tenían ni idea de que Andrés me venía a buscar
todas las mañanas.
—¿Andrés?... Nada de
eso —intenté negar rápido—, escuchaste mal.
—¿Entonces qué
dijiste?
—Eeeeh…
Está dicho, aquí muero.
—Está bien, está bien,
está bien —suspiro resignada—. Andrés me espera a fuera todas las mañanas.
—¿Es en serio?
—Pregunta mi madre.
—Sí, lo es. Me viene
a buscar para irnos al colegio.
—¿Se van juntos?
¿Cómo nunca lo veo en la mañana? ¿Hace cuánto pasa esto?
—¿No crees que son
muchas preguntas, papá? — digo afligida.
—Quiero las
respuestas.
Rodeo los ojos.
—Sí, nos vamos
juntos. No lo ves en las mañanas porque se estaciona a la vuelta de la calle.
Esto pasa hace… mucho.
—¿Y en que se van,
cariño? —La calma de mi mamá siempre es buena en estos momentos.
—En su moto, obvio.
—¡¿En su qué?!
—Exclama ofuscado mi padre.
—¡Ay, ya! Mejor me
voy porque se me hace tarde.
Camino lo más rápido que puedo hacia la
puerta, pero alcanzo a escuchar otro grito de mi padre.
—¡Dile a ese muchacho
que va a tener que venir a hablar conmigo!
Salgo de la casa negando con la cabeza.
¿Por qué tanto alboroto por eso? ¿No se suponía que todo estaba bien, que yo
podía ser feliz con él? Arg. No entiendo cuál es la idea de seguir buscándole
problemas a todo.
Corro rápido para alejarme de la casa, no
vaya a ser que a mi papá se le ocurra venir en este segundo a hablar con Andrés.
Giro en la esquina y me topo al instante con él.
—Al parecer venías
corriendo de una maratón.
Sonrío y me acerco para darle un besito.
—Venía arrancando
—intento sonreír—. Digamos que metí un poco la pata.
—¿Qué es lo que pasó?
—Mis padres se
enteraron de que vienes todas las mañanas a buscarme, y la parte de la moto no
les gustó mucho.
—No hay problema —me
guiña un ojo—, ya vendré yo a hablar con ellos.
—Esa cara… —me giro
ante la llegada de Grace— Quiere decir sólo una cosa: una noche en vela.
—¡Bingo! —le digo
como si se tratara de un concurso— Ya sabes… la combinación teléfono más novio
no es buena.
—Vas a tener que moderarte
porque o si no, te pasarás los días muerta de sueño y la cuenta del celular te
saldrá carísima —reímos juntas.
—No me digas nada tú,
que para mí también eres de las que se pasa en su cama con el celular en el
oído.
Grace
se frena y mira al suelo avergonzada. ¡Ja! La pillé. Llevo conociéndola por
muchos años ya, qué años ¡siglos! y sé lo tierna, romántica, melosa que es…
¡todo el mundo lo sabe! Y de seguro uno de sus hobbies debe ser hablar con
Emilio en las noches.
—Oye —digo para
cambiar de tema—, ¿has visto a Belén?
Me mira algo triste.
—¿No la has visto? —
Hace una mueca— Pues… creo que está en el patio, y te digo que vayas urgente
donde ella porque las cosas no están bien.
—¿Qué es lo que pasa?
—Mejor anda tú…
Maldita sea, maldita sea. ¡Que tonta soy!
Yo perdiendo el tiempo con Andrés, Max y Carla y… ¡Arg! Belén la está pasando
de lo peor. Es momento de detener esto y
no dejar que me aleje de las chicas. No
way.
Narración: Carla.
—¿Me puedes explicar
eso?
Mía
llega a sentarse a mi lado en el casino y luego apunta a las mesas de la
esquina.
—No tengo nada que
explicar.
—Sí, tienes algo que
explicar.
Suspiro y alejo la bebida que estaba
tomando.
No necesito darme vuelta y ver a Max con
sus amigos y con su ex novia conversando de maravilla. Ya me bastó con que ayer
fuera al departamento a preguntarme qué hacer, que luego mis consejos no le
hayan servido, para que ahora, cuando llego a la universidad encontrármelos
hablar y escuchando toda la mañana los rumores de ellos. ¿Cuántas puñaladas son
eso a mi corazón?
—Pensé que todo lo
que había escuchado eran sólo rumores, o cosas que se decían para crear chismes
¡pero era verdad! —Exclama— ¿Cómo? Al parecer sigue siendo un tonto e imbécil
que no sabe nada. ¡Qué rabia! Y esa plástica que de seguro hará qué cosa con él
¿Es que soportas verlos así?
Vuelvo a tomar la bebida, le doy un sorbo
largo y lento para lograr bajar el nudo de la garganta.
—Ay, Carla… —la cara
de Mía se desfigura— Lo siento —se golpea en la frente—, yo y mi boca.
—¿Sabes qué es lo
peor? —Pregunto luego de unos minutos— Que ayer cuando apareció en mi casa fue
para preguntarme qué tenía que hacer con ella.
—¡¿Qué!? A no, a ese
yo lo mato —se iba a levantar cuando yo la detuve del brazo.
—Déjalo, Mía… Además,
recuérdalo —sonrío con amargura—, soy sólo su amiga.
—¡Pero no puede hacer
eso! —apunta nuevamente hacia esa mesa.
—Claro que puede… es
más, ni siquiera sabemos bien lo que está haciendo.
—Sí que sabemos.
—Sólo lo que escuchas
de los demás… pero no la verdad.
—¿Qué me quieres
decir? —arruga su frente.
—Que a lo mejor son
sólo amigos —me encojo de hombros.
Mía asiente, pero luego sonríe con esa
mirada entre ternura y lástima que muchas veces he recibido de ella cuando se
trata de Max.
—Sí, lo sé —respondo
antes que ella—, eso es lo que yo quiero creer.
Narración: Javier.
—Nanana… nana
—tarareó.
Si pudiera contar todas las veces en las
que he cantado la canción, habrían inventado números más grandes que el
infinito. Es que parecía que ya respiraba la canción para mañana. Uf, mañana.
Se veía tan lejos todo esto cuando decidí participar, y ahora quedan sólo horas
para pararme al frente de ese grupo de personas, pararme frente a ella y…
—Javieeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeer.
Me giré inmediatamente. ¿Quién me llama de
esa forma? Desde el pasillo logro ver el pelo rubio de Gaby acercándose hacia
mí. ¿De qué me perdí?
—Dios… —Dice agitada—
Es un dilema encontrarte.
—¿Y para qué me
necesitas? Supongo que es algo importante por…
—¡No me dijiste que
mañana cantarías! —Arruga su frente y se cruza de brazo.
—Esteeee… —Me rasco
la cabeza— ¿Tendría que habértelo dicho?
—¡Pues claro que sí!
¿Es que acaso no soy tu amiga? Y más encima te he pedido un millón de veces que
me cantes y ahora lo harás ¡al frente de todos! —me acusa.
—Ahora podrás
escucharme —sonrío divertido.
—Tonto —me golpea en
el brazo—, ¿pero, cómo cantas ahora, en donde te verá más gente, y no cantaste
antes, cuando sólo te lo pedía yo?
—Porque… —intento
pensar una respuesta en tiempo record— Tengo pánico escénico — ¿de verdad? ¿Algo más tonto que eso, Javier?
¡Ash!—… Entonces la mejor forma de enfrentarlo es cantar en público.
—Aah… —dice no muy
segura— Pero si entonces cantarás mañana… ¿Me cantarías ahora? —sonríe
emocionada.
—Gaby… Mañana… lo
juro.
—Está bien… —hace un
puchero— Más te vale que la canción vaya dedicada a mí —sonríe antes de darse
la vuelta e irse.
—Si ella supiera…
—suspiro.
Me giro nuevamente al casillero y sigo
tarareando la canción.
Narración: Claudia.
—¿Alguien me puede
responder la pregunta?
Una manada de grillos suena en toda la
sala. Nadie quiere responder. O más bien, nadie sabe qué responder. Los ojos
del profesor pasan de rostro en rostro buscando a su víctima. Boto el lápiz y
me escondo bajo la mesa disimuladamente.
—Señorita Claudia…
Shit.
Me levanto nuevamente con la mejor de las sonrisas. Viejo…
—¿Sería tan amable de
responder a la pregunta?
—Este… podría, pero
no sé qué responder.
—Excelente… salga de
la sala por favor.
—¡Pero… —exclamo— Es
injusto!
—Salga de la sala.
—Profesor usted está
siendo… —comienza Belén en mi defensa.
—¿Usted también?
Ambas se van de la clase.
—¡Pero…! —exclamamos
las dos.
El profesor no vuelve a hablar sino que se
dirige a abrirnos la puerta de la sala. Maldito. Nos levantamos enojadas, pero
a la vez agradecidas de escapar de la clase.
—Gracias, eh —le digo
a Belén luego de que nos alejamos del pasillo para sentarnos en una banca.
—No creas que lo hice
por ti —bromea—, quería salir de esa clase sí o sí.
Me río de la cara de Belén.
—¿Es que le has
avisado a tu novio que saldrías de la clase? —Belén rodeó los ojos y apunta
hacia una sala.
Es Andrés quién sale de ella y sonríe al
encontrarnos afuera.
—¿Perdiendo clases?
—Error. Librándonos
de la peor clase —corrijo.
—¿Y tú? —Pregunta
Belén— ¿Escapando de los alumnos?
—Nada de eso… tenía
que ir a buscar algo a la sala de profesores.
—¿Me prestas un poco
tu celular?
Ambos se me quedan mirando.
—Necesito mandar un
mensaje —me encojo de hombros.
Andrés me lo da y continúa conversando con
Belén. Veamos, misión secreta iniciada… Investigo rápidamente en la carpeta de
contactos hasta que logro dar con el nombre de Tomás. Gracias a Dios sólo hay
un contacto que se llama así. Intento memorizarlo. 9785… no lo olvides, no lo
olvides. Sigo con el celular en la mano para hacer algo de tiempo.
—Gracias.
Lo recibe y se despide de nosotros antes de
que se le haga más tarde. Espero que se aleje y saco el mío.
—¿Tenías tu celular?
¿Entonces para qué…?
—Espera —la detengo.
Rápidamente tecleo y lo guardo en los
contactos. Bien. Paso uno, hecho.
Narración: Belén.
—¡Perfecto!
—¿Me dirás lo que has
hecho? —arqueo una ceja.
—Naah… hay algo más
importante de qué hablar.
—¿Ah sí? —digo
entusiasmada. ¿Qué chisme me traerá ahora?
—Ajá, de ti.
—¿Qué?
—Grace me dijo que
algo estaba pasando… —me mira fijamente— ¿Qué es, Belén?
Desvío la mirada y me cruzo de brazos. ¿Es
siempre tan necesario contarlo todo? ¿No puedo callarme las cosas y sólo ser yo
quien las sepa? La verdad es que sí, podría callarlo todo, pero en este caso lo
que más necesito es un consejo.
Narración: Tomás.
—Recuerden la
investigación…
—¡Adiós profesor!
—Grito desde la puerta— ¡Somos libres!
Corro rápidamente hasta el casillero. Hay
que salir de este lugar antes de que algún profesor te rapte para que lo ayudes
en algo. ¿Es que no basta con todas las clases que ya tenemos para quedarse
después unas horas más?
—¡Tomás!
—Hey, bro’ ¿te vas
ahora? —le pregunto a Mauricio.
—Sí, claro. ¿Qué te
parece si nos vamos con…
—Lo siento…
Dejo la mochila en la casilla y saco el
celular del bolsillo.
—¿Diga?
—Eeh… ¿Hablo con
Tomás? —dice una chica.
—Así es… ¿Quién es?
—Antes de todo: ¿Eres
amigo de un tal Andrés, cierto?
—Eh… sí —digo
inseguro.
—Uuf, genial. Okay,
me presento: soy Claudia.
—¿Claudia? Claudia,
Claudia, Claudia — ¿Por qué me sonaba
tanto ese nombre?— ¡Por Dios, eres la novia de Andrés!
Una risa se escucha desde el otro lado.
—Esa soy yo.
—¡Qué sorpresa! ¿Y a
que debo este llamado, preciosa?
—Cuidado ahí… puede
que no te conozca en persona, pero se mucho de ti ¿eh?
Ambos reímos.
—Necesito tu ayuda
—dice seria— Es algo ultramente secreto… ¿Estás dispuesto a ayudarme?
—Uuhh… qué miedo
—río— Anda, dime de qué se trata.
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Hola bonis *-* ¡Como las extrañé! :c
Uuuf... tantas cosas que decir >.< Así que empecemos..
Que asco de capítulo D: "¡No! Rommy, no es un asco" dirán ustedes, pero sí lo es /: Me costó demasiado, pero así demasiado sacarlo y no quedó tan bien, pero bueno, como siempre, es uno previo a la acción ;)
Ahora... Uf.
Quiero decir algo importante.- Chan xD
Sé que demoré demasiado en publicar: semanas, y de verdad lo siento, porque yo también soy seguidora y uno espera todas las semanas que suban caps... lo sé, lo sé, y de verdad lamenta TANTO no haber estado antes aquí /: pero juro que esta vez fue por una fuerza mayor.
Sé que al escribir puedo "liberarme" o hacer a un lado los problemas, desahogarme, pero esta vez no podía escribir la historia. Y sí, me desahogue, pero no lo hice aquí porque tengo el otro blog para eso, para no llenarlas de estupideces cada vez que suba un capítulo.
Lamento muchísimo todo lo que pasó, se que estaban molestas, no digan que no por favor, pero fueron cosas que se escapan de mis manos .. (aquí es la parte en la que lloro :C xD /:)
Pido millones de disculpas como ya estoy acostumbrada a hacer /: y agradezco a las chicas que me han apoyado en este tiempo *-* Son asombrosas. Muchas de ustedes entendían por lo que estaba pasando así que pueden saber que en esos momentos uno no quiero hacer nada :c Sus palabras de cariños me llegaran, sus abrazos y saludos en sus blogs también *-* (Gracias Sofi *-* No sé si habrás leído mi msje en Facebook ;) ) ¡Dios! Son realmente asombrosas :3 Y como dije, la vida sigue así que aquí vuelvo :)
Catherin: Hola guapa :) Bueno como vez, quise responder a tu comentario. No es una forma de contraatacar ni nada por el estilo. Cada vez que me atraso por obligaciones (escuela) lo asumo, pido disculpas y se que no estuvo bien. Pero este no fue el caso. Créeme, ojala hubieran sido sólo obligaciones /: Espero que no pienses mal de mi, no hago estas cosas con querer D: sólo ... uno no puede manejarlo todo perfectamente.
Emm... ya... dejando eso claro tengo que dar otra declaración :O jajaja!
¡Quiero terminar con esta novela! .____________________.
¿¡QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!? gritaran ustedes (espero xD :S)
Así es. Llevar un año en esto ya ha sido bastante .-. Y tengo ideas para otra historia que quiero escribir :3 jeje. Pero.... ¡Tengo todavía ideas para esta! D: ¿Es que no terminará nunca? xD o.O
Así que como decirlo... Cada novela tiene su climax ¿no? Pues intentaré llegar pronto a ella .-. Chan! xD Puedo decir que desde hace muuuuuuuuuuucho ya se me ha ocurrido el climax de todos los personajes, el final, el epílogo, los dialogos.. ¡Dios! llevo pensando el final casi desde que empecé o.O .. así que pueden imaginar que quiero llegar ya a esa parte y saber todo lo que pensarán de él :O También he pensando en una sorpresa, pero no daré detalles aún .. ops! xD jaajaja Creo que soy mala con ustedes xD
No crean que me he olvidado de la maratón que les debo :O jeje :$ esos caps ya están escritos hace muuucho xD pero me falta historia entre medio para que funcione >.< Si tan sólo pudiera pensar en la historia y que esta se escribiera automáticamente... uf, estaríamos al otro lado xD
Yayayaya, yo y mis comentarios largos .-. I hate it! ¬¬'
Entonces... nos estamos viendo en el sgte cap, en dónde por fin... Javier cantará *-*
PD: No creo que pueda pasarme aún por sus blogs >< Quiero poder escribir harto para así no tener que hacerlas esperar más /: Me concentraré primero es escribir al menos dos capítulos y luego volveré a comentar :) Puede que los lea, pero no tendré tiempo para dejar los testamentos de comentarios xD Uno chiquitin puede ser :)
PARA LAS CHICAS QUE ME DEJAN SUS BLOGS!
Hagamos un trato: todas las chicas que quieran que pase por sus blogs, me lo dejarán en el comentario, así yo podré seguirlas y dejarlas ya en mi lista de blogs y no olvidarme.. pero tendrán que tener un poco de paciencia conmigo >.< jajaja!